
Generalmente consumidos en la merienda o a la hora del té, los khajas son unos buñuelos fritos, dulces y almibarados que se pueden elaborar muy fácilmente y con pocos ingredientes.
Ingredientes
4 tazas de harina
2 cucharas de mantequilla derretida
2 cucharas de cardamomo molido
2 cucharillas de pimienta negra
1 cucharilla de canela
2 tazas de aceite
2 tazas de azúcar
1 taza de agua
Preparación
Paso 1 : Mezclar en un recipiente la harina, la mantequilla derretida y mezclar.
Paso 2 : Agregar agua fría para formar una masa y dejarla cubierta durante unos 30 minutos.
Paso 3 : Dividir la masa en 10 porciones de igual tamaño dándole forma rectangular y luego enrrollándolas sobre sí mismas colocando dos o tres una encima de otra.
Paso 4 : Cortar en tamaños de 2 o 3 cm.
Paso 5 : Calentar aceite en una sartén y freírlos allí hasta que estén dorados. Retirar y colocar en papel absorbente.
Paso 6 : Preparar el almíbar colocando azúcar y agua en una cacerola al fuego.
Paso 7 : Hervir hasta que se logre la consistencia del almíbar.
Paso 8 : Añadir el cardamomo en polvo, pimienta negra y canela. Remover y apagar el fuego.
Paso 9 : Colocar el almíbar en un plato hondo y embeber allí los khaja.
Paso 10 : Servir tibios.