
Esta pequeña delicia tibetana ha llegado al corazón de todos los indios en muy poco tiempo. Y los indios han refundido los momos con su particular gustos únicos hecho suyos. Ya sean momos tandoori, momos fritos o momos afganos, el amor por los momos ha crecido en sus corazones.
Al igual que la edad de Anil Kapoor, los orígenes del plato son borrosos. Sin embargo, muchos coinciden en que el plato es principalmente de origen tibetano.
La palabra momo procede del tibetano "Mog Mog", que significa literalmente bollo relleno. A su vez, la palabra Momos es una versión china corrupta del término tibetano. Se dice que el plato se extendió a varias partes de Asia a través de mercaderes chinos y newari que viajaban.
En el Tíbet, los momos se preparan con carne de yak, tomate, ajo, jengibre, chile seco y un relleno a base de aceite. Las versiones al vapor y fritas del plato se saborean con una pasta de chile. El utensilio utilizado para cocinar los momos se llama Mucktoo.
Se supone que, después de que los chinos ocuparan la región en 1959, tras el éxodo de los tibetanos del Tíbet. Los tibetanos exiliados se instalaron entonces en varias partes de la India, como Dharamshala, Sikkim, Ladakh, Darjeeling, Calcuta y Delhi.
De ahí que estos lugares se convirtieran en puntos calientes de momos y, posteriormente, la fiebre del momo se apoderara de toda la nación. Sin embargo, a diferencia de la noción popular, los momos no forman parte de la cocina tradicional del noreste de la India.
Muchos son de la opinión de que el relleno de verduras y paneer fue el resultado de la influencia india en el plato (lo que suena sensato, ya que nuestros padres, de todos modos, nos persiguen para que comamos más verduras).