El kati roll se inventó en la primera mitad del siglo XX en la ciudad de Calcuta (India), y sus orígenes se remontan a un único restaurante, conocido como Nizam's. En la época en que se concibió el kati roll, Calcuta era la capital del Imperio Británico.
La historia cuenta que los clientes británicos no querían comer kebabs con las manos, así que alguien del Nizam's decidió enrollar la carne en un paratha -un pan plano crujiente y mantecoso sin levadura- y servirlo en un envoltorio de papel.
Aunque no existe una versión oficial de esta historia, en general se acepta que el concepto de rollo de kati surgió de Nizam's. Nizam's comenzó como un puesto de venta de kebabs y parathas, y en 1932 se convirtió en un restaurante. De hecho, el restaurante sigue funcionando en la zona del New Market de la ciudad, y sigue siendo considerado uno de los mejores lugares de la ciudad para comer un kati roll.
El nuevo tentempié se hizo rápidamente popular entre las masas. En su forma original, un kati roll consistía en brochetas asadas envueltas en paratha, con capas de huevo y cubiertas con chutney. Pronto se ofrecieron opciones de relleno vegetariano, como paneer y garbanzos, como alternativa a la carne del kebab. Como escribe el crítico gastronómico Vir Sanghvi en un ensayo sobre los rollos de kati, un rollo de kati es un plato en sí mismo, no un envoltorio diseñado como medio para comer kebabs a la carrera.
Sin embargo, cuando el rollo kati cruzó las fronteras indias, la historia fue diferente: el manjar se puso de moda. La empresaria Payal Saha, originaria de Calcuta, es la primera persona que introdujo el concepto de kati roll en Inglaterra, Estados Unidos, y parte de Europa.
